La modalidad de las clases Mysore consiste en un espacio donde podamos reunirnos a compartir la práctica. Cada quien practica de acuerdo a su nivel y dentro del calor del grupo nos motivamos unos a otros a profundizar.
Mysore es el estilo tradicional de practicar el Ashtanga Yoga, y es una clase en la que cada quien practica la serie (o series) de manera individual, de acuerdo a su nivel personal. Por ejemplo, la práctica de un principiante consistirá únicamente de los Saludos al Sol. Con el tiempo el profesor le enseñará las siguientes asanas, y su práctica será más larga y aumentará la dificultad.
Una particularidad del estilo Mysore es que el profesor no se encuentra al frente guiando a los alumnos, sino que supervisa a cada uno de manera individual. De esta manera el profesor puede guiar a cada alumno de acuerdo a sus capacidades, habilidad y necesidades personales.
La supervisión del profesor consiste en ayudar a los asistentes a mejorar su desempeño y a optimizar alineamiento, respiración y demás aspectos de cada asana; lo que le permitirá al alumno saber en que debe mejorar y descubrir nuevas opciones que le ayudaran a alcanzar mayores objetivos. Debido a la atención individualizada, es una excelente manera de mejorar y avanzar en la práctica.
Al no ser una clase sincronizada, el manejo de la flexibilidad es más pausado y se puede hacer énfasis en aquellas posturas en las que cada uno tenga mayor dificultad; por tanto, se trata de poner empeño y, con ayuda de un profesional, perfeccionar todo lo que sabe.
El profesor adaptará la práctica a cada alumno, por lo que cualquier persona puede asistir, independientemente de su grado de conocimiento o estado físico.
Al alumno de nivel avanzado se le asignarán mayores retos (ya sea porque su práctica consiste de más asanas, o porque se le enseñará las versiones más avanzadas de cada una); si es principiante, se le introduce paulatinamente a la praxis. En caso de embarazo, menstruación, tercera edad, lesión u otra condición específica, se le asigna una práctica acorde a su condición.
Los únicos requisitos son autodisciplina, constancia y fuerza de voluntad.